Aunos 210 kilómetros de Córdoba capital, esta región esconde su hermosura natural, conformada por palmas caranday, cóndores y volcanes inactivos. En la zona, también se pueden visitar seis túneles, que unen Córdoba con La Rioja.
Desde la capital cordobesa se debe tomar la RP34, más conocida como el Camino de las Altas Cumbres, un circundante recorrido con hermosas vistas. Al llegar a la localidad de Mina Clavero, el camino continuará por la RP15 que, luego de atravesar la Cuesta de Brochero, comenzará a exhibir el paisaje típico de una de las regiones menos exploradas de la Provincia. Después de recorrer algunos kilómetros, del lado izquierdo de la ruta, entre palmas de caranday, comenzará a vislumbrarse la imponente figura del cerro Ciénaga, señal de que se está llegando a la localidad de Villa de Taninga, desde donde se podrá ir a la base del cerro y a los majestuosos túneles.
VILLA DE TANINGA
Este pequeño pueblo se encuentra en el cruce de la RP15 con el camino que conduce a Los Túneles hacia el oeste y a Los Gigantes hacia el este. A los pies de las cumbres de Guasapampa, bajo la mirada cercana de los viejos volcanes de Pocho, privilegiado por su clima y su entorno de naturaleza agreste, sus paisajes y aromas lo convierten en el refugio perfecto para la tranquilad y el descanso. A pocos metros de la plaza central, discurre sereno y sin apuro el río Jaime, sus interminables playas de arenas doradas parecen custodiadas por añosos árboles que aportan sus frescas sombras, invitando a descansar mientras las aguas cristalinas del río parecen jugar con la brisa. Asimismo, desde allí, se podrá llegar a las ruinas de las minas de Cuchiyaco, una antigua explotación de la que se extraía oro. Aún pueden observarse algunas bocas de ingreso a un verdadero laberinto.
ENTRE VOLCANES Y TÚNELES