En un estudio reciente, la Asociación Americana del Corazón (AHA) califica las dietas keto y paleo como las dos más perjudiciales para nuestra salud cardiovascular.
Dieta cetogénica y corazón
La dieta cetogénica o keto, que arrasa entre los famosos y que las redes sociales han encumbrado, no es tan saludable como se pensaba. Es más, el hecho de consumir cantidades muy bajas (o nada) de hidratos de carbono y cantidades elevadas de grasas (este patrón alimentario depende mucho de la proteína animal y, por tanto, de la grasa saturada) puede ser incluso peligroso.
Es verdad que se logra perder rápidamente mucho peso, pero tiene demasiada letra pequeña que si no se interpreta bien puede terminar siendo un problema para la salud de quienes la siguen a largo plazo. Así lo reveló una investigación del Centro de Innovación Cardiopulmonar de la Universidad de Columbia Británica en Vancouver (Canadá), que asoció la dieta keto o cetogénica con niveles más altos de colesterol «malo» en la sangre de algunas personas.
Este estudio pionero mostró que estos pacientes tienen un riesgo dos veces mayor de sufrir eventos cardiovasculares: dolor en el pecho, arterias bloqueadas, ataques cardiacos y accidentes cerebrovasculares. Por eso, la dieta keto es una de las peores para nuestra salud cardiovascular, según el ranking establecido por la Asociación Americana del Corazón (AHA).
Dieta paleolítica y salud cardiovascular
La dieta paleolítica, que consiste en comer como lo hacían nuestros antecesores en la prehistoria —evitando alimentos como cereales, legumbres y lácteos— también se encuentra al final de la lista.
Aunque ciertos profesionales durante años la han calificado de saludable, ya que elimina cualquier opción de alimento procesado, recientemente investigadores australianos han publicado en European Journal of Nutrition los resultados de sus investigaciones tras hacer un seguimiento durante años a dos grupos de personas, unos que seguían la dieta paleo y otros, la dieta que recomiendan las instituciones de salud australianas (similar a la mediterránea).
Al comparar ambos grupos encontraron que los seguidores de la paleolítica tenían niveles elevados en sangre de un compuesto que los especialistas asocian con enfermedades cardiacas y que suele presentarse en personas que no comen cereales: N-óxido de trimetilamina (TMAO).
Los expertos de la Asociación Americana del Corazón no niegan que estas dietas, realizadas por personas sanas, de forma puntual y durante un breve periodo de tiempo, puedan ser beneficiosas, ya que ayudan a perder peso y mejorar el índice glucémico, pero a la larga pueden ser un riesgo para la salud.
Cómo son las dietas evaluadas
Los investigadores de la Asociación Americana del Corazón analizaron los principales patrones dietéticos que se siguen en la actualidad. En esta tabla, que los ordena de más a menos cardiosaludables, se ven las principales características de cada uno de ellos.
DIETA | SE BASA EN | PERMITE | LIMITA O PROHÍBE |
DASH | Verduras, frutas, granos enteros, legumbres, frutos secos y lácteos bajos en grasa. | Carnes magras y aves, pescado y aceites no tropicales (ni coco, ni palma ni palmiste). | Limita las grasas saturadas, sodio, carnes grasas, granos refinados, azúcares añadidos y alcohol. |
Mediterránea | Verduras, frutas, granos enteros, legumbres, frutos secos, aves, pescados y aceite de oliva virgen extra. | Vino tinto con moderación. | Limita los lácteos, la carne roja, bebidas azucaradas, bollería industrial, dulces y pasteles. |
Pescetariana | Verduras, frutas, granos enteros, legumbres, frutos secos y semillas. | Pescado, marisco, lácteos y huevos. |
Azúcares añadidos, granos refinados, grasas sólidas y alcohol. Prohíbe carne y aves. |
Ovolactovegetariana | Verduras, frutas, granos enteros, legumbres y frutos secos. | Lácteos y huevos. | Granos refinados, grasas sólidas y alcohol. Prohíbe carne roja, aves y pescado. |
Vegana | Verduras, frutas, granos enteros, legumbres y frutos secos. | Limita azúcares añadidos, granos refinados, grasas sólidas y alcohol. Prohíbe carne roja, aves y pescado. | |
Baja en grasas | Verduras, frutas, granos enteros y legumbres. | Lácteos bajos en grasa, carne magra, aves y pescado. | Limita las grasas a menos del 30 % de las calorías al día, frutos secos, aceites, carne grasa y alcohol. |
Muy baja en grasas | Verduras, frutas, granos enteros y legumbres. | Limita las grasas a menos del 10 % de las calorías al día, sodio, granos refinados y alcohol. Prohíbe los frutos secos, carnes, pescado, lácteos y huevos. | |
Baja en carbohidratos | Verduras, frutas, frutos secos y semillas, pescado y marisco y aceites no tropicales (ni coco, ni palma ni palmiste). | Limita los carbohidratos a menos del 30-40 % de las calorías al día, granos, legumbres, lácteos y alcohol. Prohíbe los azúcares añadidos y la carne grasa. | |
Paleo | Verduras, frutas, frutos secos, carne magra y pescado. | Huevos. | Limita el sodio. Prohíbe los azúcares añadidos, granos, legumbres, aceites, lácteos y alcohol. |
Cetogénica | Frutos secos, carne roja, aves, pescado, huevos, lácteos enteros y aceites. | Vegetales sin almidón (verduras de hoja verde) y bayas. | Limita los carbohidratos a menos del 10 % de las calorías al día y el alcohol. Prohíbe frutas (excepto bayas), granos, legumbres y azúcares añadidos. |
Fuente: Asociación Americana del Corazón (AHA), 2023.
Por Verónica Palomo
Fuente: consumer.es